Diálogo nacional
Hace dos semanas se realizaron en Quito unas jornadas de diálogo entre representantes de cámaras de la producción, gremios laborales, asociaciones campesinas y fundaciones de carácter social, económico o político organizadas por el secretario de Planificación del gobierno del Coronel Gutiérrez, Dr. Augusto Barrera. La necesidad de diálogo en la sociedad ecuatoriana es evidente y necesaria para encauzar los destinos de la Patria, por eso, la idea misma de la convocatoria es digna de aplauso. Tuve la oportunidad de representar a Participación Ciudadana en uno de los ejes de ese diálogo y constatar el buen desarrollo del evento.
Los cinco temas del diálogo están relacionados entre sí: lucha contra la corrupción, reactivación económica, lucha contra la pobreza, política internacional y seguridad; puesto que para ganarle a la pobreza hay que aumentar las plazas de trabajo y para que esto ocurra debe reactivarse la economía a través de una política internacional que expanda mercados para nuestros productos, disminuirse los niveles de corrupción y aumentarse la seguridad ciudadana.
Cada uno de los ejes se dividió en mesas que analizaron temas derivados de los principales. La diversidad de los participantes reflejaba la diversidad nacional y nos dio la oportunidad de cruzar ideas constructivas y a veces contradictorias, pero realmente enriquecedoras para elaborar políticas de desarrollo nacional.
En el eje de competitividad y reactivación productiva en el que participé, estuvo claro que los esfuerzos que debemos hacer para mejorar la competitividad y reactivar la producción nacional son comunes y benefician a todos los productores por igual: artesanos, pequeños productores, medianas y grandes empresas. Todos esperan que se elimine el contrabando y los privilegios de los comisariatos de las fuerzas armadas para aumentar su mercado nacional; que se disminuyan las tasas de interés del sistema financiero y se establezcan líneas de crédito que sean accesibles para los pequeños productores para modernizar la producción, que se eliminen los impuestos para bienes de capital e insumos industriales para competir en iguales condiciones con nuestros socios andinos y sus productos, que se realicen negociaciones internacionales tanto regionales como bilaterales para permitirnos la entrada de productos ecuatorianos a nuevos mercados, que se haga eficiente la producción de energía y combustibles en el Ecuador para tener al menos la misma base de costos que nuestros vecinos. Sin duda, fueron más las coincidencias que las discrepancias.
Como resultados generales del diálogo se determinaron puntos de concenso y de discenso sobre causas y acciones necesarias para solucionar los grandes problemas nacionales. El diálogo nacional debe continuar y sus próximos encuentros deben de ser fuera de la ciudad de Quito: en Cuenca, Manta, Guayaquil, para lograr una mayor participación de representantes de la Costa y del Sur del Ecuador, que por obvias razones, no estuvieron suficientemente representados. Debe integrarse además a representantes de los Poderes Legislativo y Judicial, puesto que de esos Poderes también dependen los cambios que se derivan de los resultados del diálogo y que clama la ciudadanía para encauzar el desarrollo nacional.
Felicitamos al gobierno y al Dr. Barrera por esta iniciativa y esperamos que las recomendaciones de este y de los próximos diálogos sean aplicadas para beneficio del pueblo ecuatoriano.
Dr. Benjamín Rosales Valenzuela
Publicado en: Diario EXPRESO