Museo «Rendón Seminario»
Guayaquil y el Ecuador son tierra de grandes artistas, poetas y escritores. En nuestra ciudad en el siglo que esta por terminar no han faltado brillantes exponentes de las artes plásticas; uno en particular sobresale entre los grandes, este es Don Manuel Rendón Seminario. Aunque nació en París en 1894, era hijo de guayaquileños que residían en la Ciudad Luz, gracias a la riqueza generada por la exportación de la “Pepa de Oro”. Se educo y vivió en Europa gran parte de su vida, pero siempre amo entrañablemente la tierra de sus ancestros. Vivió muchos años junto a su esposa Paulette, en Galápagos, Cuenca, Guayaquil y San Pablo; inspirándose en nuestros paisajes, colores y gente, para cultivar el arte que brotaba de sus precisas pinceladas.
Hace poco mas de un año, se celebro en Guayaquil el centenario de su nacimiento, con una serie de exposiciones de su inmensa obra. Tuve la oportunidad de ver algunas que impresionaron mi espíritu y me permitieron conocer mas profundamente la inmensidad de este genio. A fines de 1985, el Sr. David Goldbaum Morales, edito un excelente catalogo razonado por Juan Castro y Velázquez de la obra pictórica de Don Manuel Rendón, que esta contribuyendo a que la grandeza de los trabajos de este pintor de raigambre guayaquileña sean reconocidos mundialmente.
Desperdigados por algunos museos de la ciudad podemos encontrar muchas de sus obras. Muchas mas están en las casas de ilustres ciudadanos. Su obra fue muy amplia y sus connacionales supimos apreciarla. Como máximo homenaje a su genialidad y a la de otros pintores guayaquileños de este siglo que termina, creo que debemos impulsar la construcción en Guayaquil, del Museo Rendón. Como el de Van Gogh en Amsterdam, o el de Picasso en Barcelona. Un museo en donde concentremos la obra de Rendón, y la de algunos de sus contemporáneos. Algunas piezas formarían la colección permanente del museo y otras serian cedidos temporalmente por sus dueños para su exhibición.
Un sitio conveniente para la ubicación de este Museo seria en las inmediaciones del Centro de Arte de la Sociedad Femenina de Cultura. Se pudiera utilizar la misma vía de acceso y el mismo parqueadero del eficientemente administrado Teatro. Quizá, la misma exitosa Sociedad, con la ayuda del Municipio porteño, del Banco Central, de la empresa guayaquileña, y de los amantes del arte, pudieran llevar adelante el proyecto, y la administración del Museo Rendón. Estoy seguro que el merecido reconocimiento a la memoria de este inmortal artista que se realizaría con la construcción de una obra de esta naturaleza, redundaría en beneficios culturales y turísticos directos para Guayaquil y su entorno.
Tendría que reconocerse en este museo a otros celebres artistas que han nacido o vivido en nuestra ciudad en el siglo XX. Pintores fallecidos como Roura Oxandaberra, Andrade Faini, Sóla Franco deberán tener sus exposiciones permanentes. Otros que continúan trabajando, pudieran presentar retrospectivas de su obra en exposiciones temporales.
Un Museo de esta naturaleza puede completar las muestras culturales de la Ciudad. No tiene que competir con los otros museos de Guayaquil, debe existir cierta especialización en ellos. El Municipal debe ser mas, uno de carácter histórico; el Nahín Isaias, concentra su bella colección en el arte colonial quiteño; el del Banco del Pacifico, en la arqueología de la Costa; el del Banco Central, en arqueología nacional. Otros deberán de definirse y deberán de promocionarse todos juntos, como excelentes muestras de la historia, la cultura, y el folklore, de nuestra ciudad, región y país.
Dr. Benjamín Rosales Valenzuela
Publicado en: Diario EXPRESO